lunes, octubre 24, 2011

Municipalia I

Municipalia I

No se pueden tomar como realidad las abstracciones. Hago esta afirmación a propósito de la polémica que se ha levantado en todo el país sobre la afirmación de que se iban a suprimir todas las diputaciones, Y hasta los municipios. No hace mucho (unos unas semanas), en una tertulia de esas de las televisiones, oí a un ilustre letrado que no tenía que haber municipios con menos de 5.000 habitantes. Esto ya se ensayó. Hacia 1976, creo, se publicó en el BOE una especie de Ley de Bases de Régimen Local que proponía esa agrupación de municipios para que el menor tuviera, al menos, 5000 habitantes. Afortunadamente no se puso en práctica y quedó abandonada esa Ley en las páginas del BOE, sin que se fuera más allá. Se habría destruido el Estado español. En Castilla y León hubo otro intento de distribución del territorio (una Ley) que afortunadamente se dejó que el tiempo la enterrara. Se tenía que haber felicitado pública y privadamente (yo lo hice) a quien fue el enterrador de esa Distribución del Territorio.

En estos momentos el demonio anda suelto. Se está hablando de municipios no viables. A los municipios se les ha estrellado encima el rotundo peso de la “crisis”. Los presupuestos se han venido abajo, sin remedio. Las malas informaciones están culpando de esta situación a mala administración y esta información sectaria ha cuajado. La teoría de Göebels: una mentira repetida se convierte en verdad. ¿Las verdaderas causas? La bajada de sustanciales ingresos por la crisis, la imposibilidad moral de subir las exacciones municipales por encima de ciertos límites y las subidas de las tarifas de la energía y de los suministros. De poco sirve que en el presupuesto de un municipio se proponga una partida para el pago del consumo eléctrico, si al mes de ser aprobado, me refiero al presupuesto, las tarifas eléctricas suben dos o tres veces. La partida queda desbordada. Y lo mismo podemos decir de los suministros, que en el transcurso del año actual (2011 por ejemplo), han subido un 10% de media. Las exacciones no pueden sufrir esas subidas. Con estas perspectivas ¿dónde se han ido los presupuestos? Lo que se dice de los municipios se puede decir de las Diputaciones y Mancomunidades, que también son administración local.

La causa de todo esto es que no se han abordado con firmeza y seriedad dos factores que afectan a la Administración Local: La transición abrió el sistema de las Autonomías. A la Administración Local se le decía más o menos: “paciencia que en cuanto se termine el proceso autonómico pasaremos al resolver cuanto afecta a la Administración local”. Este proceso ha durado veinticuatro años. Incluso en Castilla y León, desde 1999, se habló del llamado Pacto Local y financiación de las Haciendas Locales. El Pacto Local en parte se ha aplicado. Pero la financiación, no. Pues cuando toda la Administración Local estaba esperanzada para ello, a partir del 2004 se iniciaron las reformas de los Estatutos de Autonomía. Otra vez vuelta a empezar, porque la Administración Local se volvió a quedar relegada, sin solucionar sus problemas. Y aquí se sigue, cuando las oscuras campanas de las supresiones de municipios empiezan a sonar. ¡¡Pues no señor!! Mucho cuidado con la supresión de municipios y las Diputaciones, porque la existencia de los municipios, tal como ahora se contempla, la ha realizado la Historia y ésta es un factor de consolidación que no puede romper un decreto. Legislar con la regla y el cartabón es muy fácil. Lo difícil es gobernar después, con esa Ley.

Ensayos de agrupación de municipios se hicieron en los años 1968, 1969 y 1970. Fue la ruina de los municipios cabeceras, ya que esta agrupación se realizó sin un reglamento de funcionamiento, y para un régimen autoritario (democracia orgánica), pero no para un régimen democrático…… y así ha ido todo.

El municipio nació (ya en el Imperio Romano) como administración próxima al ciudadano. Segovia era municipio cuando se construyó el Acueducto, según los últimos estudios históricos de personas especializadas. El objetivo de estas Instituciones Locales fue la prestación de servicios a los ciudadanos, porque la proximidad de esa administración proponía las necesidades de medio ambiente, de servicios y de calidad de vida que los ciudadanos precisaban. Incluso los municipios asumieron la creación de servicios necesarios que correspondían a otras administraciones, pero que estas no atendían: ej. Educación primaria en zonas rurales (escuelas municipales) y secundaria en las mismas zonas (Colegios Libres Adoptados, de iniciativa municipal, que después se convirtieron en centros estatales), hospitales, residencias de mayores, etc. (Todos servicios deficitarios, pero que los ciudadanos precisaban, y la Administración Local los asumió)

Ninguna de estas cosas son abstracciones. De momento lo dejamos aquí hoy. Seguiremos el razonamiento en días sucesivos.


Eusebio García González.
.Santa María la Real de Nieva.

Publicado en ABC "Castilla y León" el 26 de Septiembre de 2011